Patologías relacionadas con la Ingesta de Gluten
Los trastornos relacionados con el GLUTEN son patologías cada vez más frecuentes que afectan actualmente a nuestra sociedad y presentan una elevada prevalencia. Tienen características específicas que permiten diferenciarlas.
Los cereales han sido considerados un alimento fundamental de la dieta. A través del desarrollo de la cocina, el ser humano ha producido alimentos ricos en gluten, con el fin de aprovechar al máximo las propiedades nutricionales de este alimento. De tal manera que el trigo se ha convertido en uno de los elementos centrales de la dieta mediterránea. Entre las patologías relacionadas con la ingesta de gluten, contenido principalmente en el trigo, la cebada y el centeno, la enfermedad celíaca (EC) es la más conocida.
La EC es una condición inflamatoria crónica que afecta al tracto gastrointestinal y que se desarrolla en sujetos genéticamente predispuestos. La manifestación más común es la malabsorción de nutrientes. Otra patología condicionada por esta proteína es la alergia al trigo (AT), que constituye una reacción inmunológica adversa al gluten mediada por la inmunoglobulina E.
Recientemente está aumentando la sensibilidad al gluten no celíaca (SGNC), definida como la aparición de una variedad de manifestaciones relacionadas con la ingestión de gluten, en pacientes en los que la enfermedad celíaca y la alergia al trigo han sido excluidas. En este artículo se describen estas tres entidades con sus mecanismos patogénicos y las diferentes manifestaciones clínicas.
Principales síntomas relacionados con la SGNC
Síntomas Prevalencia
Distension abdominal 72%
Dolor abdominal 77%
Diarrea 40%
Estreñimiento 18%
Eczema y/o rash 33%
Cefaléa 32%
Confusión mental 42%
Fatiga 36%
Depresión o ansiedad 15%
Parestesias de piernas,
brazos o dedos 17%
Dolores musculares
o articulares 28%
Actualmente disponemos de diferentes pruebas diagnósticas que ayudan a la correcta clasificación de los sujetos en este espectro de patologías relacionadas con el gluten.
El tratamiento común de estas patologías consiste en la exclusión de los alimentos que contienen gluten de la dieta.
Esta dieta debe ser estricta en el caso de la enfermedad celiaca y de la alergia al trigo por las consecuencias derivadas de la activación del sistema inmune y de los mecanismos relacionados con la alergia que pueden originar complicaciones graves en algunos casos.
En los pacientes con sensibilidad al gluten no celiaca se recomienda también la restricción del gluten en la dieta para conseguir un alivio sintomático.
Sin embargo, algunos de estos sujetos toleran pequeñas cantidades de gluten en la dieta y no van a tener por ello consecuencias de gravedad salvo la aparición de alguna de la sintomatología que llevó al diagnóstico.
Aunque la restricción del gluten de la dieta pueda parecer una medida sencilla, para los pacientes afectados por estas patologías supone un cambio importante en su alimentación y una atención especial a la contaminación cruzada que puede haber entre los diferentes alimentos.
El aumento en la prevalencia de estas entidades ha provocado un aumento paralelo en la producción de alimentos sin gluten, así como la concienciación de la sociedad hacia esta dieta, lo que finalmente puede ayudar a su cumplimiento.
Si eres una persona que presenta alguna manifestación por el consumo de GLUTEN no dudes en solicitar ayuda.